Nutrición, un verano saludable

Alimentación saludable en verano

El pasado jueves 22 de enero, el Centro de Extensión de nuestra clínica realizó con éxito una nueva Charla Saludable abordando un tema que interesa a muchos en esta época del año, titulado “Por un verano saludable”, dictada por la nutricionista de Clínica Ciudad del Mar, Claudia Pérez.

Entre las principales dudas de los asistentes a la charla fue cómo mantener una dieta saludable con la mayor cantidad de nutrientes obtenidos de la variedad de frutas y verduras que nos ofrece la temporada estival.

La especialista de la clínica viñamarina definió el concepto de dieta, como la alimentación que se materializa durante el día y no como un significado de restricción. En tanto, una dieta saludable, se traduce en la ingesta variada, balanceada y con el mayor número de colores posible de alimentos durante el día.  

En este sentido, la nutricionista describió lo que se conoce como “dieta multicolor” o “nutricolorimetría” que incluye los cinco colores del bienestar (blanco; verde; naranjo/amarillo; rojo y azul/morado), cuyo objetivo es buscar la combinación específica de frutas y verduras de estos colores. En este sentido, señaló que “ojalá que el 60% de éstas sean ingeridas crudas, para conservar la mayor parte de los nutrientes”, acotó Pérez.

El otro tema que se abordó fue el etiquetado nutricional de los alimentos, más allá del aporte calórico, es fijarse en la cantidad de azúcar, que deben ser de menos de 0,5 gramos; grasas totales, ojalá con menos de 3 gramos por porción y sodio, cuidando que sea de menos de 140 milígramos por porción.  

Por último, la nutricionista, Claudia Pérez, invitó a los asistentes a tener conciencia tanto de la calidad como de la cantidad de alimentos que ingerimos durante el período de vacaciones, lo que nos permitirá conservar los logros obtenidos luego de una dieta complementada con ejercicios moderados y mantener nuestro metabolismo estabilizado.  

Las tres preguntas básicas son; saber lo que comes; cómo y cuando lo comemos para lo cual hay tres recomendaciones; no prolongar el ayudo porque se disminuye el gasto energético; comer fraccionadamente y comer poniendo atención en lo que comemos, sin distracciones y de la forma más lenta posible.