Anemia: Conoce las causas y factores de riesgo de esta condición

La anemia es una patología que se define como una disminución en los niveles de glóbulos rojos que se producen en la médula ósea y que contienen una proteína llamada hemoglobina, la que permite transportar oxígeno desde los pulmones a todos los tejidos del organismo, por lo que es importante saber cómo detectar a tiempo esta enfermedad. 

El Dr. Mauricio Cancino, médico internista de Clínica Ciudad del Mar, explica:  “Existen distintos tipos y se clasifican en secundarias a la pérdida de sangre, ya sea aguda o crónica, por alteración en la producción, por ejemplo, falta de hierro, o un aumento en la destrucción (hemólisis)”.  

Los síntomas que se presentan son:  

    • Palidez de la piel y mucosas  
    • Fragilidad del cabello y/o uñas   
    • Debilidad y fatiga (cansancio)  
    • Mareos  
    • Cefalea  
    • Falta de atención, complejidad para concentrarse  
    • Alteración en la memoria   
    • Sensación de falta de aire o dificultad para respirar   
    • Taquicardia  
    • Intolerancia al frío  

La principal causa es la deficiencia de hierro, el que es fundamental para la producción de hemoglobina. A su vez, esta patología puede ser la manifestación de otras afecciones asociadas a la falta de hierro como la enfermedad renal crónica, u otras donde afecta la maduración como el déficit de vitamina B12. Finalmente, se observa en hemorragias, por motivos autoinmunes o destrucciones de los glóbulos rojos por afecciones hereditarias.   

“Los más propensos a desarrollar esta afección son las mujeres, embarazadas, vegetarianos estrictos y niños en edad de crecimiento, por sus mayores demandas para la formación de tejido muscular. A su vez, los antecedentes de problemas crónicos, infecciones y trastornos autoinmunes, aumentan el riesgo de padecer anemia. Es importante señalar que el alcoholismo, uso de drogas, exposición a sustancias químicas tóxicas como el uso de medicamentos sin indicación médica, pueden potenciar la manifestación de esta condición”, señala el médico.   

Para un diagnóstico acertado, el Dr. Cancino realiza una completa historia clínica junto con un exhaustivo examen físico. Posteriormente, se solicitan exámenes de laboratorio y, según sea la causa a estudiar, de imagenología. Además, se pedirán análisis específicos como el recuento de reticulocitos, bilirrubina indirecta, frotis de sangre periférica y, recientemente, la haptoglobina cuantitativa, examen fundamental para abordar a estos pacientes y que está disponible en Clínica Ciudad del Mar.   

“El tratamiento dependerá del tipo de anemia. Puede incluir suplementos de hierro, vitaminas, minerales u otros medicamentos específicos incluso en algunos casos se requiere transfusiones o administración de eritropoyetina que ayuda a que la médula ósea produzca más células sanguíneas”, añade.   

Un paciente no diagnosticado y sin tratamiento suele tener impedimentos para realizar su vida cotidiana con normalidad. Cuando es severa, puede ocasionar graves consecuencias en el organismo como cardiopatía coronaria y la muerte. Se debe consultar a un médico cuando se observen signos de la enfermedad y ante cualquier cambio en la condición de salud de una persona.   

El Dr. Cancino destaca que para prevenir esta patología es fundamental hacer actividad física, hidratarse de forma correcta y tener una alimentación saludable. Además, de controles periódicos y evaluaciones realizadas por profesionales que diagnostiquen y realicen un seguimiento para mantener un completo bienestar físico y mental.