Buena alimentación: el mejor aliado para el rendimiento escolar

Tan importante como no olvidar todos los útiles escolares en la mochila, es tomar un correcto desayuno y llevar colaciones y almuerzos saludables al colegio. Y es que más allá del peso, la alimentación incide, de manera directa, condicionando el grado de alerta, la capacidad de concentración y el rendimiento físico.

Así lo explica la Dra. Alexa Puchi, pediatra del Centro de Obesidad Infantil de Clínica Ciudad del Mar, quien agrega que una adecuada nutrición es el principal condicionante ambiental para lograr la máxima capacidad de crecimiento, que viene genéticamente determinada. Además, facilita la ocurrencia de desarrollo y maduración del niño a las edades adecuadas.

Según la especialista es necesario que los niños consuman fibras, carnes blancas y frutas. Estas últimas se pueden preparar de forma más atractiva, elaborándolas en brochetas o batidos. “Es importante crear hábitos. Que los menores coman cuatro veces al día e ingieran sólo una colación. Y que los fines de semana lo hagan sentados a la mesa, de preferencia en familia”

Algunos buenos ejemplos de colaciones son los panes con agregados en bajas calorías como: aves y verduras. Los lácteos como las leches o yogurt descremados  también son una alternativa para los recreos.

Y como el desayuno es el alimento más importante del día, para su consumo se recomienda cereales sin azúcar o avenas.

A continuación les entregamos  algunos consejos prácticos:

1.         Los padres deben practicar una alimentación sana junto a sus hijos, predicando con el ejemplo, evitando tener en casa golosinas y bebidas

2.         Se aconseja no utilizar la comida como premio. Especialmente con comida chatarra.

3.         Evite darle golosinas todos los días de la semana. Es mejor que elija un día a la semana para dar comida de mayor densidad energética, como queque, pizza o completo, pero con moderación.

4.         Si su hijo, excepcionalmente, quiere comer papas fritas, prepáreselas al horno. De ese modo evitará las frituras.

5.         Fomente el consumo de agua.

6.         La presentación de los alimentos debe ser agradable, como por ejemplo bastoncitos de verduras, brochetas de frutas, etc.

7.         Procure que los niños coman con el grupo familiar o con los compañeros de curso.

8.         Se recomienda a los padres no dar dinero a los niños para que compren sus colaciones, evitando así, que consuman alimentos no saludables.

9. La elección de la colación, el número de porciones y su densidad energética, debe realizarse en función del gasto de energía que tenga el niño y su condición nutricional.