Osteoporosis en la tercera edad

La osteoporosis es una enfermedad que afecta a los huesos, y es la más común entre las  enfermedades óseas, haciendo que se vuelvan frágiles y propensos a fracturarse. La enfermedad hace que, por lo general, éstos pierdan densidad, que es lo que mide la cantidad de calcio y minerales en el mismo.

Entre una de las causas está la falta de calcio, ya que es uno de los minerales necesarios para la formación de los huesos. Si usted no obtiene suficiente calcio a través de la dieta, los huesos pueden volverse frágiles y más propensos a fracturas. La pérdida ósea también puede derivar en tendencias hereditarias  a tener huesos más delgados, lo que deriva posteriormente en la enfermedad.

La doctora Lilith Stange, reumatóloga de Clínica Ciudad del Mar, explica que esta enfermedad “se produce por pérdida de la masa ósea, debido a un desequilibrio entre la formación y la resorción de hueso, con pérdida de su resistencia y favoreciendo así el riesgo de fracturas.

La osteoporosis significa “hueso poroso” y es una dolencia presente más en mujeres que en hombres, debido a que están expuestas a una violenta caída de los niveles de estrógeno al llegar a la menopausia, ya que esta hormona es un importante factor en la mantención de la masa ósea.

La especialista explica que el diagnóstico de la osteoporosis es gradual, debido a lo silencioso que resulta este mal, por lo general, su primer síntoma suele ser una fractura. Aproximadamente el 75% de las fracturas se producen sobre los 65 años de edad, en las vértebras se puede sospechar por encorvamiento dorsal o pérdida de la altura. Finalmente, el examen que la confirma es la densitometría ósea.

Según una estimación del Colegio Americano de Reumatólogos, una de cada dos mujeres y uno de cada seis hombres, mayores de cincuenta años, presentará una fractura relacionada con osteoporosis en algún momento de su vida. Las fracturas más comunes son las de muñeca, de cuerpos vertebrales y de cadera.

Tratamiento

La Dra. Stange afirma que el tratamiento es individualizado y que debe ajustarse a las características del paciente, a la presencia de otras enfermedades, a sus preferencias, al costo y a su estilo de vida. De acuerdo a esto, el médico decidirá cuál es el fármaco más apropiado para tratar la osteoporosis, entre los que pueden ser medicamentos orales de manera diaria, semanal o  mensual,  o inyecciones subcutáneas o intravenosas.

“Actualmente hay una variada gama de fármacos que han demostrado preservar la densidad ósea y disminuir el riesgo de fracturas. Además, debe asociarse a un suplemento adecuado de calcio y vitamina D, a fin de que la terapia para la osteoporosis logre su máxima eficacia”, agrega la especialista.

Prevención

La facultativa afirma que la prevención de la osteoporosis se hace a lo largo de toda la vida. En las primeras décadas se adquiere la máxima masa ósea, por ello se debe combatir la malnutrición, entregar el aporte adecuado de calcio y vitamina D, realizar actividad física regular y no iniciar el hábito de fumar.

En los adultos se deben mantener estas medidas, evitando además el consumo excesivo de alcohol y cafeína. En los adultos mayores hay que prevenir el riesgo de caídas, por lo que no es recomendable realizar movimientos bruscos o practicar actividades que puedan resultar peligrosas.